Pareja casándose en su ceremonia civil en su boda en Can Macià

Boda en Can Macià

¡Agárrate que se vienen curvas! Anna y Pere, una pareja joven aficionada a los viajes y al deporte, decidió celebrar su boda en Can Macià. Como ya te puedes imaginar, fue un día lleno de magia y amor en esta pintoresca bodega en Òdena, Barcelona. Desde los preparativos rodeados de barricas de vino hasta la fiesta que hizo temblar los viñedos, todo quedó capturado en imágenes para su posteridad. Levanta tu copa de vio y brinda conmigo, que te lo cuento en palabras, y te lo enseño en imágenes:

Retrato de pareja de recién casados en los viñedos de Can Macià

Los preparativos de la boda en Can Macià

Un reportaje de fotos entre viñedos en esta boda en Can Macià

Anna y Pere son una pareja pragmática y sin tapujos. Llegaron juntos a Can Macià y organizaron los detalles de última hora estando de lado. Mientras llegaban sus familias, se empezaron a organizar. Sacaron el traje y el vestido de sus fundas y poco a poco, el ambiente acogedor de las bodegas hizo que cada momento previo a la ceremonia fuera algo íntimo y especial. Algo que sin duda se nota en las fotos del reportaje de la boda.

Pere se preparó con sus padres y su hermana en la planta inferior. Donde el ventanal de madera nos proporcionó una luz inmejorable para hacer este tipo de retratos. Mientras que Anna, se quedó en la suite junto a su madre mientras la peluquera terminaba de darle los últimos toques. 

Boda civil frente al molino de Can Macià:

Pere bajó a recibir a los invitados que poco a poco se fueron sentando a la zona de sillas que había frente al molino en los jardines. Pere entró caminando a pase firme del brazo de su madre. Sus ojos mostraban emoción y ganas a partes iguales. Algo que no pudo esconder al ver llegar a Anna. Qué con su vestido blanco lucía radiante.
Intercambiaron los votos, hablaron los hermanos de ambos y también hubo tiempo para que los amigos de toda la vida sacaran algún trapo sucio de la las noches de adolescencia. Después de recorrer el pasillo de salida y de quitarse todos los pétalos que recibieron, nos fuimos a hacer su reportaje de fotos de pareja.

Un reportaje de fotos entre viñedos

Celebrando una boda en Can Macià, con sus viñedos… No podía faltar el momento del reportaje de fotos de pareja entre las hileras de plantas. Cada imagen capturó la complicidad y felicidad de Anna y Pere. La naturaleza tranquila de los viñedos fue el telón perfecto para retratar su amor

Cena entre risas y juegos:

Después del aperitivo y las fotos de grupo, entramos al comedor principal Algo oscuro dado el techo alto con soportes de madera negra. A lo que le puse solución montando el flash en la cámara.
En realidad, el verdadero problema de este comedor viene cuando todavía hay luz natural entrando por la (única) ventana grande. Sobretodo porque la oscuridad del interior se ve acentuada por el contraste de la luz natural que entra por el cristal. Pero cuando el sol de va, no hay problema. Ya que “solo” tenemos un entorno oscuro al que tenemos que añadir luz con el flash.

La cena fue una sucesión de risas y momentos bonitos entre plato y plato. Para terminar, amigos y familiares organizaron juegos ingeniosos para la pareja, y juzgadlo por vosotros mismos. Pero las fotos de esas risas y la complicidad del momento son tesoros.

Se desató la fiesta desatada en el exterior:

Cómo no puede ser de otra manera en una boda en Can Macià, la fiesta tiene que explotar. Y si el clima lo permite, mejor que se viva en el exterior, como fue el caso.
Anna y Quim brillaron con su baile nupcial ante todos los invitados. Acto seguido el dj empezó a pinchar los primeros temas y todo el mundo se puso a bailar bajo las estrellas. Las luces parpadeantes, las copas y las risas llenaron la noche mientras la pareja y sus seres queridos celebraban la vida entre los viñedos.

En conclusión; este fue un día inolvidable en Can Macià:

A fecha de publicación de este post, Anna y Pere están a punto de recibir su álbum de boda. Algo que van a guardar como un diario visual del día más especial de su historia de amor. Un día que jamás olvidaran. Y personalmente, la historia de Anna y Pere en Can Macià es un capítulo que yo también llevaré siempre en el corazón!

No fue un fotógrafo, fue el fotógrafo.
Fue de los primeros en llegar y de los últimos en irse
Mireia & Ivan

Hey!
Si vais a celebrar vuestra boda en
Can Macià, creo que es momento de conocernos:

Gracias!

Quieres ver alguna de mis bodas en detalle?